Muchas personas cuando llaman para reservar un apartamento, me llaman Aurelia. Pero, no soy Aurelia.

Aurelia es mi madre. Nació en Alquézar en el 1936, en plena guerra civil española. Cuando tenía doce años, como la mayoría de menores en muchos de los pueblos de España, tuvo que marcharse a trabajar a otro lugar, lejos de los suyos. Pasaron los años y construyó su vida en Terrassa (Barcelona). Se casó con Alejandro y formó su familia.

¿Y, quién soy yo?

La hija menor de Aurelia y Alejandro. Y quién gestiona la empresa: Apartamentos Casa Aurelia. Me llamo Anna y en el año 2000, cuando tenía 25 años, decidí dejar la ciudad para ir a vivir al pueblo y reencontrarme con mis raíces maternas. Era algo que hacía tiempo que me rondaba por la cabeza, pero no sabía ni cómo ni cuándo tomaría la decisión.

Mi idea inicial no era montar un negocio turístico, es más, desconocía completamente el sector. Sencillamente quería vivir cerca de la naturaleza y disfrutar de mis aficiones que eran el senderismo y la btt. En Alquézar, empecé trabajando como autónoma, reparando trajes de neopreno. Pero, como el turismo en Alquézar iba en augmento y había pocos alojamientos, mis padres vieron clara la oportunidad de ofrecer, un alojamiento pensado para familias y grupos de amigos.

Abrimos las puertas de los apartamentos, en el año 2002. Al principio, fue difícil porque no pertenecíamos a este gremio y no teníamos ni idea. Pero, me puse manos a la obra. Al mismo tiempo que gestionaba la empresa, me saqué el Grado de Turismo. A parte, realicé muchos cursos de atención al cliente, publicidad y marketing y con el boom de las redes sociales, un master en social media.

De este modo, poco a poco, hemos conseguido ser un empresa estable y consolidada.

Des del principio, tenía claro que la empresa debía llamarse Casa Aurelia. Aunque no se pudo llamar así, hasta pasados cuatro años.

Es un reto y una gran responsabilidad levantar con éxito una empresa que lleva el nombre de tu madre. Pero, siempre supe que todo saldría bien porque en realidad, las cosas importantes las he aprendido de ella. Aurelia, es quien me ha enseñado a trabajar, vivir y hacer las cosas con amor.

¿Hay alguien más?

¡Claro! Trabajando codo a codo conmigo, está Esperanza que, por cierto, ¡también dejó la ciudad para venir a vivir al Somontano! Lleva muchos años con nosotros, ya es como de la familia.

Nuestra filosofía de trabajo se basa en conseguir que los clientes se sientan bien, seguros y tranquilos en los apartamentos. Como en su casa. Facilitar toda la información necesaria para que disfruten de su estancia en Alquézar. Y, por supuesto, con una adecuada relación calidad-precio.